Adopciones
Adoptando estás salvando una vida. Cada perro o gato adoptado deja su lugar para que ingrese otro y pueda ser refugiado.
Adoptar es un acto de compasión y de responsabilidad, por eso es necesario que estés completamente seguro de que eres capaz para cuidar de un animal. Un animal de compañía dependerá toda su vida de ti y estarás asumiendo un compromiso serio por todo ese tiempo.
Consideraciones a tener en cuenta antes de tomar la decisión de adoptar.
Integrar un animal a la familia sólo porque los niños piden uno para jugar es un gran error. Los animales no son un juguete. ¿Qué pasará cuando tus hijos crezcan, o cuando se aburran de él? ¿Quién lo alimentara y bañará? ¿Quién lo sacará a pasear? El animal es parte de la familia y todos tienen que estar de acuerdo con la adopción.
Espacio y lugar donde vivirá: no todos los animales necesitan un parque para correr, pero sí espacio para moverse cómodamente por la casa y un lugar diferenciado para dormir y descansar. Si hay espacios al aire libre deben estar techados y cercados para evitar que el animal pueda escaparse. Si vives en departamento deberás considerar el tamaño del animal a la hora de elegirlo, y sobre todo su nivel de actividad. La falta de grandes ambientes puede compensarse con ejercicio diario para que el animal desgaste energía. Asegúrate que en tu edificio esté permitido tener animales de compañía. Si eliges un cachorro, averigua antes qué tamaño tendrá cuando crezca.
Tiempo y dedicación: es necesario que tengas tiempo para compartir con ellos. Los animales necesitan interactuar con sus protectores, no pueden ser ignorados sólo porque estés ocupado o cansado. Piensa antes de adoptar si tendrás momentos de juego con tu compañero, si pasarás tiempo a su lado y si saldrás a caminar con él (incluso en días de lluvia o frío), aun cuando vuelvas cansado del trabajo; te estará esperando ansioso y querrá salir después de estar varias horas solo.
Mantenimiento y gastos: los animales tienen un calendario de vacunación anual que cumplir y desparasitaciones periódicas. También necesitan un alimento de buena calidad para preservar su salud. Y hay que considerar que la atención veterinaria tiene un costo considerable.
Hábitos de vida: evalúa si tendrás paciencia con el animal, si soportarás los pelos en las alfombras, los hoyos en el jardín y algún mueble o prenda rota por el animal (claro, no hay nada que una buena educación no pueda evitar); Si hay niños pequeños o personas muy mayores no es conveniente incorporar un perro de gran porte y muy enérgico, ya que podría tirarlos accidentalmente jugando. Si estas muchas horas fuera tendrás que buscar un animal tranquilo acostumbrado a quedarse solo. Si no estás seguro si es preferible un cachorro o un adulto ten en cuenta que un cachorro requiere bastante dedicación para educarlo: deberá aprender dónde hacer sus necesidades y cuáles son las cosas que no debe morder y romper. Adoptar un perro adulto es una ventaja ya que la mayoría están educados. También ten en cuenta si viajas por trabajo o vacaciones, qué posibilidades tendrás de llevarlo contigo o si alguien podrá cuidarlo en tu ausencia.
Quizás te parezcan demasiadas preguntas para hacerse, pero muchos animales en los refugios están allí porque sus protectores no pensaron realmente cuánto tiempo y dinero llevaría cuidar de ellos.
Un animal te dará amor incondicional, lo mejor que hay en la vida.
Para adoptar
- Las adopciones se tratan solamente con el adoptante final, no mediante terceros.
- Es requisito excluyente ser mayor de 18 años.
- No damos en adopción cachorritos de menos de 6 meses cuando hay niños menores a 6 años en la casa.
- Se puede venir al refugio a conocer a los animales.
- Al solicitar la adopción de un animal como primer paso hacemos un cuestionario de pre-adopción para ser completado por el interesado.
- Luego hacemos una visita al domicilio para conocer a la familia y constatar las condiciones en que vivirá nuestro refugiado.
- En caso de aprobar la adopción, solicitamos los datos del adoptante (nombre, IFE, domicilio y teléfono) y de la pareja, padres o hermanos.
- Una vez hecho esto, el adoptado es llevado a su nuevo hogar, donde se firma el Contrato de Adopción y se paga una Cuota de Recuperación de los gastos veterinarios.
- Somos padrinos de nuestros adoptados de por vida, esto es que podrás contar con nosotros cuando lo necesites, por lo cual también los visitamos en su hogar para ver cómo están.